RESERVA MARINA DE INTERÉS PESQUERO DE LA PALMA

La Reserva Marina de Interés Pesquero de La Palma celebró el pasado sábado su 23º aniversario, destacando su dedicación a la protección y sostenibilidad de uno de los ecosistemas más singulares de Canarias. Desde su creación en 2001, esta reserva ha desempeñado un papel crucial en la conservación de la biodiversidad marina y en el apoyo a la pesca artesanal, impulsando así el desarrollo socioeconómico local.

Con una extensión de 3.564 hectáreas, de las cuales 847 están designadas como zona de reserva integral, esta área marina está completamente bajo la gestión del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Su peculiaridad radica en la ausencia de una plataforma continental amplia, siendo reemplazada por fondos abruptos con un gran valor paisajístico y biológico, que incluyen numerosas grietas, cuevas y túneles que albergan comunidades marinas de gran interés. En las cercanías de la costa, se encuentran grandes profundidades habitadas por especies pelágicas.

La reserva es hogar de diversas especies pesqueras, como la vieja, la salema, el medregal y el ábade, que son menos comunes en otras islas del archipiélago canario. Su flora marina incluye comunidades de algas pardas y especies protegidas como el Cystoseira abies-marina, además de fondos con anémonas tropicales y una rica biodiversidad de invertebrados, destacando la langosta canaria. Además, mamíferos y tortugas marinas como el delfín mular, el tiburón martillo y la tortuga boba son avistados con regularidad en esta área protegida.

El seguimiento científico, intensificado durante la erupción del volcán Cumbre Vieja, ha permitido obtener valiosos datos sobre la interacción de la lava con el mar y la evolución de los fondos volcánicos, así como sobre el comportamiento de las especies pesUWqueras.

La Reserva Marina de La Palma es una de las tres gestionadas por el Ministerio en Canarias, junto con la Reserva de Punta de La Restinga-Mar de Las Calmas y la de La Isla Graciosa e Islotes. Juntas, estas reservas protegen un total de 75.507 hectáreas.

Las reservas marinas de interés pesquero están diseñadas para regenerar los recursos pesqueros y mantener las pesquerías artesanales tradicionales. Desde la creación de la primera reserva marina, la de la Isla de Tabarca, el sector pesquero ha sido un ferviente defensor de estos espacios. En las reservas se permite la pesca artesanal y actividades recreativas como el buceo.

Actualmente, la red de reservas marinas comprende 12 espacios protegidos, gestionados de forma exclusiva por el Ministerio o en colaboración con las comunidades autónomas. Estos espacios abarcan 105.243 hectáreas, con 10.162 hectáreas dedicadas a reserva integral y 95.081 hectáreas para otras actividades reguladas. Estas reservas son un modelo de gestión basado en vigilancia, control, seguimiento científico y divulgación.