¿Has oído hablar del Bicácaro? Su nombre científico es “Canarina canariensis”, así que es más canaria que el gofio. Conócela para que se potencie en la jardinería de nuestras islas. ¡Además es comestible!
El bicácaro Canarina canariensis (L.) Vatke, también llamada bicacarera, bicacarero o campanilla es una planta trepadora endémica de Canarias que habita principalmente en los bosques de laurisilva del archipiélago. Pertenece a la familia de las campanilláceas y es una de las tres especies del género Canarina. Es, además, la especie que tipifica dicho género. Se trata de una de las especies vegetales más emblemáticas de Canarias, considerada por algunos autores como la «flor nacional» de las Islas.
Se trata de una planta herbácea perenne, trepadora y glabra (sin pelos). Posee un tubérculo grueso y profundo. Los tallos, trepadores o colgantes, pueden alcanzar hasta tres metros de longitud, son carnosos, huecos, contienen látex en su interior y se renuevan cada año desde el tubérculo, por lo que se dice que la planta es anual en su parte aérea. Las hojas, de color verde intenso en el haz y más pálidas en el envés, son opuestas, pecioladas, hastadas (es decir, tienen forma de flecha), tienen los bordes dentados y están recubiertas por una sutil pelusilla blancuzca, por lo que se dice que la planta es glauca. Llegan a medir 12 cm. Las flores, pedunculadas, son de color anaranjado a rojo, tienen forma de campanilla y miden entre 3 y 6 centímetros. Son bisexuales, esto es, tienen tanto estambres como pistilos, solitarias (están separadas entre sí), cimosas (situadas en los extremos de los tallos) y en su interior puede observarse un vistoso patrón de venas escarlata sobre los pétalos de color naranja. Los frutos son bayas carnosas, ovaladas de 3 a 4 centímetros de diámetro y de un color rojizo que al madurar se vuelve negro. Son comestibles y su sabor es dulce.
Puede darse entre los 300 y los 1.000 metros de altitud, siempre en lugares sombríos, húmedos y humosos. La floración, es decir, el período en el que la planta florece, tiene lugar entre los meses de noviembre y mayo. En la polinización intervienen aves de la familia de los sílvidos, como las currucas y los mosquiteros. En el verano se pueden recoger los frutos y las partes aéreas de la planta, es decir, las partes que sobresalen de la tierra, se secan y rebrotan desde la raíz con las lluvias del otoño.
Es posible cultivar C. canariensis en exteriores en las regiones de clima subtropical y en las de clima templado donde no se produzcan heladas.
La planta es sensible al frío, por lo que es posible que no alcance las dimensiones descritas anteriormente fuera del clima subtropical. También puede cultivarse como planta de interior. Aunque tolera la exposición directa al sol, es aconsejable plantarla en zonas sombreadas, con suelo húmedo y bien drenado. Al igual que otras plantas tuberosas, no debe regarse durante el periodo de reposo, cuando desaparezcan las partes aéreas. Esta especie se propaga tanto por semillas como por esquejes tomados de la base de los tallos. Las semillas tardan entre cuatro y cinco semanas en germinar y no deben cubrirse con mucha tierra, pues necesitan la exposición al sol para germinar.
El bicácaro es, junto con el mocán y el madroño, una de las pocas plantas autóctonas de Canarias que dan fruto comestible. Es por esto que los guanches, los primeros pobladores del archipiélago, consumían sus frutos (llamados también bicácaros) con frecuencia. También es empleada como valiosa planta ornamental desde el siglo XVII y como forrajera en las regiones en las que aún es frecuente.
FUENTE TEXTO Y FOTOS: https://es.wikipedia.org/wiki/Canarina_canariensis