El césped en nuestros jardines consume gran cantidad de agua y necesita muchos cuidados, ¿sabes cual es la alternativa? ¡Las plantas tapizantes! ¿Las conoces?
Esta vegetación rastrera aparece como alternativa al césped tradicional y se emplea para dar color y vivacidad a los rincones más oscuros, aburridos y sosos. Existen diferentes tipos de tapizantes y de ellos hablaremos en este artículo.
De uso principalmente ornamental, las especies rastreras cuentan con numerosas variedades, siendo las más comunes y populares las que detallaremos a continuación.
Si quieres saberlo todo sobre las plantas tapizantes, ¡qué mejor manera de hacerlo que en el blog oficial de Husqvarna!
¿QUÉ SON LAS PLANTAS TAPIZANTES?
¿Quieres renovar tu jardín y alejarte de lo convencional? ¿Prefieres dejar a un lado el césped, la hierba y usar otro tipo de vegetación? Si es así, decirte que tenemos la solución perfecta para ti: las plantas tapizantes.
También se conocen como rastreras y están compuesta por especies que, una vez que germinan, cubren la totalidad de una superficie y, sobre todo, del suelo.
Destacan por su desarrollo específico, pues como quizás puedas intuir, forman una especie de cubierta denominada alfombra vegetal. Ésta es capaz de crecer por todo el terreno, cubriendo por completo un espacio.
¿Para qué se usan?
Son plantas principalmente ornamentales.
Gracias a su bajo mantenimiento y a la poca cantidad de agua que necesitan para sobrevivir, estas especies se usan como alternativa al césped tradicional. En la actualidad, se emplean para recubrir tanto terraplenes, taludes y vallas como paredes o superficies irregulares.
¡Y no nos olvidemos de los acuarios!
Sí, también hay plantas tapizantes acuáticas. La popularidad de estas variedades se ha ido acrecentando con el paso de los años y las peceras pasan de ser simples rocas o cubículos a convertirse en perfectos paraísos.
¿Y quién no querría tener un paraíso submarino?
Entre las acuáticas destacan la Utricularia graminifolia (planta carnívora originaria de Asia), la Eleocharis parvula (conocida como “junquillo salado”) y la Riccia fluitans (con cuerpo en forma de tridente).
Si buscas una planta que te ayude a disimular las imperfecciones de un terreno o cubrir áreas donde apenas pueda crecer otro tipo de vegetación, las tapizantes son ideales para ello. Además, son una solución natural para las malas hierbas, puesto que las privan de la luz, del agua y de los nutrientes que necesitan para proliferar.
Con las rastreras también podemos tener caminos frondosos y coloridos.
Y para decorar las zonas de paso, las áreas alrededor de los árboles o esos muros de color gris que no aportan nada, es para lo que se utilizan las plantas tapizantes.
Puede que ya conozcas alguna de las variedades de rastreras, pues muchas de ellas se pueden encontrar en prácticamente cualquier jardín del vecindario o de la ciudad. Pero, lo que quizás no sepas, es que existen muchísimas especies tapizantes, siendo todas ellas vistosas y originales.
Ventajas y desventajas de las plantas tapizantes
La llegada de las plantas tapizantes a nuestros jardines se ha cobrado una víctima, el césped.
La popularidad con la que gozan viene determinada por los escasos requisitos de cuidado que tienen. Estas especies han proliferado gracias a la sencillez de su cultivo y, en muchos casos, han llegado a superar a la clásica hierba (por lo menos en lo que se a usos se refiere).
Pero no todo son ventajas.
Como toda variedad vegetal, también tienen aspectos en contra. Conocer cada uno de los aspectos, positivos y negativos, en muchas ocasiones, supondrá el éxito de un jardín. Sus cuidados, sus texturas o su crecimiento son algunos de los aspectos a tener en cuenta a la hora de llevar a cabo su plantación.
Para evitar que la decoración de tu jardín sea un fracaso, te dejamos una lista de los factores positivos y negativos. Analiza con sumo cuidado cada uno de los puntos y valora si te compensa plantar este tipo de especies.
Ventajas de las rastreras frente al césped
Las plantas tapizantes se han convertido en la alternativa perfecta al césped tradicional y esto se debe a sus numerosas ventajas:
- Brindan una gran variedad de colores y texturas. Algunas tapizantes tienen flores y otras incluso son olorosas. Las posibilidades de decoración son más y mejores, por lo que se pueden crear jardines muy especiales e interesantes.
- Cuando en el jardín se instalan este tipo de plantas, el trabajo se reduce considerablemente, ya que no hay que segarlas. El mantenimiento es mucho menor y son perfectas para los principiantes de jardinería.
- No necesitan tanta agua para desarrollarse de forma óptima, sobre todo cuando ya han arraigado. Sin embargo, el césped se debe regar habitualmente. Además, el sistema más habitual de riego es el de microdifusión (instalación sencilla que permite un mayor ahorro de agua) mientras que el de la hierba es con aspersión (son sistemas más caros).
- Se pueden plantar en cualquier tipo de superficie, desde suelos irregulares a paredes o muros. Son perfectas para taludes pues no sólo sirven para ornamentación, también son capaces de sujetar el suelo y detener la erosión. Las posibilidades y las aplicaciones son más.
- Crean una capa de residuos orgánicos cuando las hojas viejas se caen. Estos se convierten en una fuente de nutrientes, pues, al fin y al cabo, una vez que se descomponen se convierten en abonos naturales. Con las tapizantes prácticamente no vas a necesitar abonar.
- Son un remedio natural para las malas hierbas. Cuando se cultivan plantas cubresuelos, éstas comparten suelo, agua y nutrientes con la maleza, por tanto, evitan su proliferación.
Como ves, las plantas tapizantes presentan un cultivo sencillo, un mantenimiento menor y grandes posibilidades, no sólo de decoración. Con las rastreras, tu jardín se verá limpio, colorido y fresco.
Desventajas de las tapizantes
Aunque presentan numerosas ventajas, las tapizantes también tienen ciertos inconvenientes. Pero no te preocupes, la cantidad de puntos negativos, es mucho menor que el número de aspectos positivos.
Destacan los siguientes:
- No se pueden pisar de la misma manera que la hierba: quizás sea el aspecto más importante a la hora de considerar plantar especies rastreras en un jardín. Algunas variedades sí soportan el pisoteo, como por ejemplo la Leptinella squalida o las del género Thymus.
- Para cubrir por completo una superficie, requieren que pase cierto tiempo, algo que si se usan tepes de césped no pasaría. Aunque necesitan periodos más largos, la espera merecerá la pena.
- Requieren un estudio más profundo: tal vez no sea una desventaja, pero, conocer la especie y todo lo que conlleva (es decir, los cuidados y requisitos) es de suma importancia a la hora de sembrar tapizantes.
TIPOS DE PLANTAS TAPIZANTES
Existen multitud de variedades y tipos de plantas que se pueden usar para cubrir el jardín o el muro que rodea nuestra casa. Su uso ornamental y sus facilidades de cuidado hacen que su utilización se haya puesto de moda con el paso de los años.
Los tipos de tapizantes más comunes son las crasas (con hojas carnosas), las vivaces (caducifolias), las perennes (verdes todo el año), las trepadoras y los arbustos (tallos ramificados).
Crasas
Son las plantas tapizantes que se caracterizan por tener unas hojas carnosas recubiertas con pelusa. Estas hojas de gran tamaño son las encargadas de almacenar el agua y los nutrientes que requiere la planta, por tanto, las cantidades necesarias de agua son mucho menores.
Además, presentan un menor mantenimiento que otras especies. Dentro de este grupo se encuentran por ejemplo la Lampranthus aureus.
Vivaces
Son las tapizantes que pierden las hojas y los tallos durante la época más fría. Mantienen latentes las raíces hasta que llega la primavera. Cuando las temperaturas aumentan, las partes que han perdido comienzan a rebrotar sin ningún problema.
Destaca la Festuca glauca.
Perennes
Al contrario que las anteriores, estas especies conservan todas las hojas y los tallos durante el otoño y el invierno. Algunas incluso florecen durante todo el año, por eso también son conocidas como “siempre verdes”.
Destaca la Begonia semperflorens.
Trepadoras
Son las que se usan para cubrir la totalidad de paredes, muros o columnas. Tienen unos tallos que crecen de forma considerable. Las trepadoras se adhieren a la superficie y trepan por ella.
Dentro de esta categoría se incluye la Hedera helix o la Lonicera.
Arbustos
Son las plantas tapizantes de carácter leñoso que carecen de tronco. En su lugar tienen tallos ramificados. Son de menor tamaño que los árboles propiamente dichos.
Destacan el Romero rastrero o el Junípero.
FUENTE TEXTO: https://www.todohusqvarna.com/blog/plantas-tapizantes/