Cinco usos de las cáscaras de huevo en el jardín. ¿Sabías que puedes utilizar este material en tu jardín?
No es ningún secreto que los huevos de gallina son tremendamente nutritivos, pero no solemos reparar en que buena parte de esas propiedades alimenticias también se encuentran en las cáscaras, por lo que pueden tener una gran utilidad. En lugar de acabar en el cubo de la basura, sería interesante darles usos que nos ayudaran a abonar las plantas de distintas maneras, aprovecharlas como pesticidas naturales o, por ejemplo ayudarnos a dar de comer a los pájaros.
No en vano, la cáscara de un huevo de gallina se compone de alrededor de 96 por ciento de carbonato de calcio (CaCO3), lo que lo convierte en una fuente de calcio excepcional que obtenemos de forma gratuita, y que será muy útil como fertilizante o como una fuente de calcio en la alimentación animal. Además, hay otros muchos usos que nos resultarán prácticos para el jardín.
Dentro de estas ideas generales pueden descubrirse variaciones, además de otros usos creativos que nos ayudarán a cuidar nuestro jardín o pequeño huerto reciclando estos desechos orgánicos muy habituales en el hogar. Veamos cinco de ellos:
1. Como abono: Como hemos apuntado, las cáscaras de huevo son ricas en calcio, mientras los posos de café proporcionan nitrógeno, ambos un complemento perfecto para enriquecer la tierra de jardín, ya sea directamente o introduciéndolo en la pila de compostaje. Y, por otra parte, las plantas de maceta también agradecerán que en lugar de gravilla pongamos en el fondo cáscaras de huevos picados, ya que además de ayudar al drenaje actuarán de abono, si bien hay que tener en cuenta que se descomponen fácilmente. Por lo tanto, lo ideal sería colocarlas sobre una primera capa de gravilla. En el huerto, lo agradecerán especialmente los tomates y pimientos.
2. Como semillero: La imagen superior es una clara muestra de la utilidad de los huevos como semilleros. No sólo nos sirven hasta que germinen, sino que además podemos plantarlas directamente en macetas o en el jardín, pues las cáscaras de huevo son biodegradables. Para este uso, dejemos la parte más ancha del huevo como base y no olvidemos hacer un pequeño agujero de drenaje pequeño en ella para luego simplemente añadir la tierra y las semillas.
3. Pesticida natural: Si troceamos las cáscaras y las esparcimos alrededor de una planta, formando un círculo, estaremos creando una barrera contra plagas que se desplazan por el suelo, como gusanitos, babosas o caracoles. Funciona tanto para plantas ornamentales como en el huerto, siempre que echemos lo suficiente como para hacer el terreno intransitable para ellos. Su uso permite ahuyentar a los animales sin matarlos, pues acabarán buscando otras plantas de más fácil acceso.
4. Decoración: Las cáscaras de huevo finamente molidas e incluso tintadas con colorantes naturales (remolacha, cebolla, etc.) o incluso de un color blanco o marrón naturales nos proporcionará un interesante elemento decorativo que al mismo tiempo servirá de abono. Espolvorear una cantidad generosa sobre la tierra, incluso hasta llegar a taparla en el caso de las macetas, puede resultar bonito, ahuyentar a las plagas y fertilizar la tierra.
5. Alimentar a los pájaros: Si quieres atraer biodiversidad a tu jardín o balcón, nada como hacerles la vida más fácil y agradable a los pájaros. Además de construirles nidos y darles alpiste, trocitos de fruta, etc., puedes darles cáscaras de huevo troceadas mezcladas con su alimento. Recordemos que muchos pájaros acaban con los insectos y otras plagas, aunque también es cierto que les gusta probar nuestras cosechas los primeros…
Por último, no olvidemos esterilizar las cáscaras de los huevos antes de utilizarlas, pues son un foco de bacterias importante que conviene neutralizar. Bastará con hervirlos durante veinte minutos para conseguirlo, por lo que las cáscaras de los huevos duros son idóneas.
FUENTE: https://ecologismos.com/cinco-usos-de-las-cascaras-de-huevo-en-el-jardin/