Te enseñamos las pautas para crear un huerto urbano en casa. Si tienes un huequito en casa, ya puedes aventurarte a la horticultura.

En las últimas décadas han salido a la luz algunas prácticas poco amigables con la salud alimentaria que han dejado en evidencia el uso de sustancias tóxicas y dañinas para el ser humano. Estos problemas, junto con la tendencia de llevar una vida más saludable y una alimentación más limpia, han animado a muchas personas a plantearse cultivar sus propias frutas y verduras.

El hecho de vivir en la ciudad complica el tener un huerto propio, pero hay fórmulas que lo hacen posible, tanto si se opta por alquilar una parcela como por cultivar la propia casa o en el jardín, en el caso de disponer de él.

Un huerto urbano en tierra firme, en Asunción (Paraguay). Efeagro/Andrés Cristaldo

VENTAJAS

Los beneficios más destacables para tener un huerto propio, aunque solo esté formado por dos o tres plantas, son la ayuda al equilibrio biológico y psíquico, que se refleja en una mejor calidad de vida; el componente educativo que representa esta iniciativa para las familias con hijos, ya que se fomenta el respeto por la naturaleza y el medio ambiente; la mejora de la calidad del aire y la posibilidad de consumir con certeza alimentos frescos y libres de tóxicos químicos.

COMO DECIDIR EL TIPO DE HUERTO

Para elegir el tipo de huerto a implementar es importante escoger un lugar de la casa cercano a una fuente de luz natural, así como el espacio que vamos a destinar a esta aventura. Los más comunes son:

  • Huerto sobre el suelo: son posibles sólo si se tiene jardín o un pequeño espacio de tierra disponible. Ofrecen muchas posibilidades al disponer de mayor superficie.
  • Huerto en mesas o cajones de cultivo: se pueden construir con materiales reciclados y ofrecen grandes posibilidades y facilidades. Asimismo, es posible acoplarlos fácilmente al espacio disponible y funcionan también como objeto de decoración.
  • Huerto en macetas: cuando se tiene espacio en diferentes áreas de la casa, esta es la opción perfecta, ya que las macetas se pueden repartir y recolocar individualmente.
  • Huerto vertical: aparte de ser una pieza decorativa muy de moda, son la alternativa perfecta para pisos con poco espacio disponible.

Ujn huerto urbano didáctico en Pekín (China). Efeagro/Adrian Bradshaw

ELECCIÓN DE LOS CULTIVOS

La opción más razonable es empezar con pocos cultivos, sencillos y de fácil mantenimiento, y poco a poco ir ampliando su cuantía y diversidad, teniendo presente que hay ciertos cultivos que se pueden cultivar durante todo el año pero la mayoría son de temporada. Entre los más fáciles para empezar están:

  • Todo el año: zanahorias, espinacas, acelgas, perejil.
  • En primavera-verano: fresas, tomates, judías, guisantes, berenjenas.
  • En otoño-invierno: guisantes, cebollas, pimientos, puerros, remolacha.

SIEMBRA Y MANTENIMIENTO

La siembra se puede hacer directamente en el emplazamiento definitivo de la planta, o en un semillero para protegerla en las primeras fases de desarrollo. Muchas veces esta última opción es la recomendable, no solo para proteger las plantas, si no para distribuir mejor el espacio y luego trasplantarlas cuando tienen cierto desarrollo.

Una vez tangamos elegido los tipos de cultivos que queremos, es también importante la elección del abono y el fertilizante, así como descartar productos que contengan químicos y velar por la seguridad, por lo que incluso ciertos abonos ecológicos recomiendan su aplicación con guantes y gafas protectoras, entre otros elementos de seguridad. Es fundamental seguir la dosis y periodicidad de aplicación que aparezcan en las instrucciones de cada producto.

Un huerto urbano en la provincia de Granada (España). Efeagro/Raúl Caro

El riego puede ser tanto manual, como por goteo programado, lo cual dependerá del tiempo disponible y la preferencia de cada uno.

La cosecha es el proceso más esperado por todos, pero hay que efectuarla en el momento oportuno. Algunos frutos, como el tomate, se recolectan cuando están maduros, pero otros, como el pepino o los calabacines, hay que recolectarlos antes de que maduren.

Un huerto en casa requiere de tiempo y dedicación, pero los beneficios que nos aportará merecen la pena. Además, se pueden establecer rutinas familiares de cuidado del huerto para repartir el trabajo, y los más pequeños disfrutarán mientras aprenden valores importantes de respeto a la naturaleza y sostenibilidad.

FUENTE: https://www.efeagro.com/microsite/pautas-para-crear-un-huerto-urbano-en-casa/

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.